Cosas de emperadores

-El MUY Extra de este invierno está dedicado a "Preguntas y Respuestas", en él hay un apartado dedicado a las excentricidades de algunos emperadores romanos. Posiblemente algunos hechos estén exagerados, pero no deja de ser curioso (y flipante) el comportamiento de algunos emperadores.

*Que Calígula estaba como un cencerro no lo niega nadie, estaba tan grillao que su compañero de juergas era su gran amigo (además de cónsul y senador) el caballo Incitatus, el cual se lo llevaba a sus de sobra famosas orgías.

*Otro que también estaba un poco pasado de tuercas era Nerón, al que le gustaba cargarse a la gente (básicamente a todo aquel que le llevase la contraria) y quemar cosas (como Roma). Mató a su madre (Agripina), a su primera esposa (Octavia) y a un hombre suyo de confianza (Sexto Afranio Burro) .

*El emperador Claudio no tuvo mejor idea que publicar una ley que instase a la población a no reprimirse los pedos en público. Pese a esto era un hombre muy cuerdo.

*Domiciano no era tonto, mas bien era inteligente y trabajador pero pecaba de orgulloso, celoso y egoísta. Llegó a forrar palacios con espejos para vigilar si alguien quería matarlo por la espalda. Su desconfianza le llevó a matar a su primo Flavio Clemente, tiempo después Domiciano fue asesinado. Su propia mujer había conspirado contra él.

*Adriano (nacido en Sevilla) fue un enamorado de la cultura griega. Tras unas revueltas en la provincia romana de Judea decidió expulsar a todos los judíos de Jerusalén, reconstruyó la ciudad al estilo helenístico y plantó una estatua de Zeus en el lugar del templo.

*Al libertino Cómodo (hijo de Marco Aurelio) le gustaba la fiesta y hacer de gladiador. Esto último lo hemos visto en la película "Gladiator", pero sus rivales no eran super-machos como Russel Crowe, sino más bien pringaos medio drogados o mal armados.

*A Caracalla la mala leche le venía ya desde jovencito. Estuvo a punto de apuñalar a su padre por la espalda en público y se cargó a su hermano Geta porque lo de compartir el trono no le iba mucho. No volvió a Roma, se pasó el día a día de guerra en guerra.

*A Heliogábalo le gustaban dos cosas: las deidades fálicas y los tíos con pollas grandes, además quería ser mujer. Ésto último le llevó a preguntar a sus médicos -ATENCIÓN- si podían injertarle una vagina (recuerden que estamos en el 218). Como no encontraron una solución, al colega le dio por ver si cortándose la minga se solucionaba su "problema".